De chicos y grandes

Ayer estuvimos hablando de que me interesa mucho las resonancias, relaciones, que tienen lo que pasa en la crianza cuando uno es bien chiquito y cómo es cuando crece.

Hablábamos de lo difícil que es poder verlo, ya que entran una cantidad de variables imposible de abarcar.
Pero muchas veces es clarísimo, viendo quizás personas distintas, pero como las relaciones, las experiencias de chico lo marcan a uno y le dejan formas de hacer las cosas, formas de relacionarse con los otros, con las cosas.
Ahora, habiendo leído Las herencias I, (que me resuena y me expresa por todos lados) pienso también en las herencias positivas digamos. Ayer, observando a una familia con su beba pensaba más en lo otro, de alguna forma en todo lo que recibimos las personas para trabajar digamos, para transformar. Pensaba también y pienso, en lo distinto que debe ser un padre o una madre, que se pregunta cosas, que va cambiando, que se modifica, que hace terapia o lo que haga para ampliar su espacio poético, para repensarse, para ser conciente de sus debilidades y uno o una que no lo hace, que sigue derecho, sin cuestionarse la forma de hacer las cosas, que no se pregunta.
Sin dudas después de pensar un rato siempre llego a una conclusión parecida y es que lo "mejor" es intentar un equilibrio.
Porque tanto Mar como yo tenemos quizás demasiadas preguntas, quizás nuestras familias se piensan demasiado, no lo se. No estoy seguro y tampoco se del todo si él piensa lo mismo. Pero aunque sea yo, más de una vez sentí ganas de seguir más derecho y preguntarme menos.
En este momento elijo preguntarme, creo que está bueno, pero muchas veces veo personas que siento que viven como si fuera de una manera más simple, algo así. Y siento que son más felices.
Y nuevamente pienso que lo que está bueno es el equilibrio.

Ahora, por momentos me voy un poco más al extremo y siento que un padre o una madre que no se pregunta nada, está siendo.... No se... Pero algo negativo con los hijos.
Sin duda siempre se le pasan mambos a los hijos y no quiero que se entienda que para mi los padres y madres tienen que ser de determinada forma con los hijos o ser algo que no son. También creo profundamente que uno como padre transmite lo que es y no lo que intenta ser o lo que dice.
Pero por eso me parece que está bueno repensarse, tranformarse, buscarse, encontrarse, desencontrarse, seguir buscando, disfrutar mucho, eso todo lo que se pueda.

La verdad que siento que me estanqué.
Que cualquier cosa que ponga ahora es aseverar cosas que no si están buenas, que no se si son realmente lo que pienso, vinieron muchas preguntas. Viene también un poco de miedo de pecar de soberbio al pensar que yo tengo la posta y que los demás están haciendo las cosas mal. Es tan delgado el límite que a veces me da mucho miedo, es como un precipicio.

Bueno, por ahora lo dejo acá.

Ojalá comenten, así se mueve...

2 comentarios:

  1. no se por qué ni cómo, esto me llegó directamente. Desde que comparto mi vida y mi tiempo con mi hija, toda certeza mía se vino abajo. Lo que era yo y lo que creía del mundo. Pero creo que tu reflexión es por demás necesaria para todos. Si uno no se imagina, no se inventa a sí mismo, no se llena y al final no tiene nada que dar (ni al hijo, ni al mundo). Me parece que es como el proyecto de ustedes. -Un trabajo de construirse y llenarse para dar y así y solo así, se aprende a recibir, que es lo más difícil a veces. Gracias, Alba

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  2. Pero por eso me parece que está bueno repensarse, tranformarse, buscarse, encontrarse, desencontrarse, seguir buscando, disfrutar mucho, eso todo lo que se pueda.

    En mi opinion, es asi como lo pensas, a mi me parece que toda transformacion nos enseña más, que ustedes sabran mas que sus padres, asi como sus padres sabian mas que sus abuelos, porque se va avanzando. Es lo que a mi me parece. Mis padres siempre dicen que hay un dicho en Idish, cuya traducción sería mas o menos la siguiente:
    Uno vive 100 años y muere ignorante (la palabra en idisch es NAR)
    Creo que no alcanzan los 100 años de nadie, que todos se suman y siempre aprendemos.
    Ricardo.

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